- Una pinza de tender.
- Pintura témpera blanca y negra.
- Pincel
- Cartulina
- Plantilla de las alas y la aleta del avión
- Lápices de colores
- Pegamento de barra
Se desmonta la pinza de tender y se pinta con témpera blanca. Mientras la dejamos secar, se dibujan las alas y la aleta en una cartulina blanca y se pintan de colores (se pueden dibujar en cartulinas de colores y te evitas la colorear).
Nos aseguramos de que la pintura de la pinza esté seca y las colocamos bocabajo (lo planito hacia arriba) y le damos pegamento en esa parte. Colocamos las alas una delante y la otra detrás y pegamos la otra pinza encima (lo planito hacia adentro).
Apretamos con firmeza durante un momento para que el pegamento haga su efecto y luego colocamos la aleta con pegamento sobre la parte trasera del avión.
Para terminar, decoramos con unos puntitos los laterales superiores del avión, que simularán las ventanas ... et voilà! Aquí tenemos un avioncito monisimo. (La pena es que no vuela)