Todas "mis yayas" (de superados los 80..) se agolpaban alrededor de la mesa de trabajo y estaban concentradas en sus tareas, cuando de pronto suena una musiqueta de un teléfono móvil. Yo pensé: "ui, el mio no es, entonces..." Entonces una de ellas descolgó y habló tranquilamente con su familia. El hecho no es que hablase por el móvil (no veaís lo familiarizados que están los mayores con estas nuevas tecnologías...) la razón de mi sorpresa fue la melodía que sonó de tono del aparatito... aquí os la dejo. (Gratamente sorprendida...)
6 comentarios:
Que maja la abuelilla, me alegra mucho de que convivan ambos mundos, lo tradicional y lo moderno para formar la suma de un todo. (Uy que filosófico estoy hoy). Un beso Kela
jajajajjaja
vaya marcha!!
eso seguro que alguna nietecilla... jeje
Te iba a decir lo que Josiko, que igual algún nieto le había cambiao el tono... pero oye, nunca se sabe, a lo mejor es una fan incondicional de Mägo, jajaja
Me inclino más por su hijo - nieta, a ella, no la veo yo fan de Mägo...aunq sea de izquierdas...
Je, je. Seguro que luego se iba en moto a casa con la chupa de cuero y pegando acelerones
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