El final del verano....

Se acabaron las vacaciones. Llegó de nuevo la vuelta al cole, y voy a hacer una crónica de lo que he vivido el último mes.

Después de ir al pueblo (como ya había contado), hicimos una escapadita pirenaica a Álquezar. Un pueblo oscense muy turistico, con bellos paisajes, mucha tranquilidad y sendas por las que mezclarte con la naturaleza. Nos alojamos en un hotelillo de la zona muy recomendable: Hotel Maribel (...y q nivel, Maribel, juas). Jacuzzi en la habitación, trato muy familiar, cama gigante, sofá y detallitos divinos (chocolatinas, una rosa, ese peacho de desayuno de los campeones).... vamos, un lujazo para ir a descansar un fin de semana (los días más estupendos del verano). Totalmente recomendable. Y lo más curioso, las habitaciones tienen nombre de tipos de uva (garnacha, macabeo, tempranillo...).

Y para terminar las vacaciones, fin de semana rural (en Coscojuela de Sobrarbe) para celebrar los cumpleaños de 5 de los amigos de la pandilla. La casa gigante, antiquisima y muy chula. Juegos, risas, cenas temáticas, excursiones a la naturaleza (cañón de añisclo) y a los pueblos colindantes (Aínsa, Barbastro...), regalos... Un cumpleaños multitudinario dificil de superar... el listón está muy alto.


Vistas....

Nuestra sangría...

El llamador tenía forma fálica, símbolo del culto a la fertilidad...

¿Cuándo repetimos?